lunes, 3 de diciembre de 2012

Felicitación Navideña



De repente, recuerdo el suave tacto de la mano de mi padre  acariciándome  mientras contemplábamos el belén.  Cierro los ojos y puedo percibir incluso el intenso sabor de su copa de anís, el olor a canela de la caja de polvorones recién abierta, y el sonido de aquel villancico que siempre cantaba mi madre: “La Nochebuena se viene, la Nochebuena se va,  y nosotros nos iremos y no volveremos más” ¡Qué ajeno estaba entonces de cuanta verdad, y tan cruda, contenía aquella entrañable cancioncilla!

Hoy, transcurridos muchos años,  de nuevo frente al belén recién montado, siento, como puñaladas en el alma, la ausencia de aquellos seres queridos, pero a pesar de ello, estoy contento, me siento pleno y feliz,  porque ahora soy yo quien acaricia la cara de mi hijo mientras me tomo la copa, y es mi mujer quien canta.

Por eso, querido amigo, aprovecha este instante y brinda conmigo, porque la felicidad está hecha de pequeños momentos como este, que pasan y no vuelven nunca.

 Feliz Navidad.


Ignacio Bermejo Martínez

1 comentario:

Sara dijo...

Brindo por ti amigo, aún queda para la navidad, pero ya está en escaparates y demás, la noto menos en el ánimo de la gente, que estamos tristones por todo lo que la casta política está montando, ellos si, entre los que se fueron y los que vinieron montaron el belén y sus prtensiones y villancicos son otros...en que gran problema se han convertido estos políticos de la democracia...pero perdona, no quiero enturbiar tu bella entrada con el fango, asi es que te deseo que las disfrutes mucho en compañía de los tuyos.
Chin chin Ignacio y mi abrazotedecisivo